martes, 22 de septiembre de 2015

Nocturnica muerte,
pequeño final...

me anuncio por la tarde,
porque he de necesitarte.

La sal de los obstáculos quema mi garganta,
y veo mis manos resecas frotarse,
rasposas,
queriendo apaciguar el mismísimo dolor.

Me anuncio por la tarde,
porque he de necesitarte.

Quisiera regalarte la porción que me queda. 

No resisto el amor,
y se que aun no llega la noche, 
pero mi ser se canso de ser por hoy.

No resisto las horas,
y por eso quiero finalizar mi día,
apagando esta luz,
muriendo por amor.

Calma mi dolor de la manera mas rápida, tomándome, por favor.

Los colores en mi mano se multiplican,
trasladándose,
(buscando el beso)
llegan a mi boca,
como por teletransportación.

La acidez sube,
y a la inversa,
los colores.

Acostada puedo sentir como mi cuerpo,
se adormece,
estás llegando.

Sonriendo.

Y la música con vos.

Bienvenida, quietud pálida, 
ya no más que física,
ya no mental,
que descansa reseca frente a un ventanal de cristal.

Ya no hay días,
ni horas, 
ni amor,
ni vos.

Ya nada se encuentra, y todo fue un error.

jueves, 2 de julio de 2015

Cristales de colores, se reflejan en mi cuerpo escuálido, y desnudo..
Entran por los ventanales y golpean mi cuerpo,
como si fueran rocas resplandecientes enviadas por el sol.
Como rayos con poca fuerza,
ellos queman.

Como el amor perro quema, 
como los sentimientos después de él..
Como el extrañamiento,
la tristeza, 
la ira, 
la soledad, 
la oscuridad, 
el llanto, 
la preocupación, 
el desencanto, 
la desilusión, 
la no salida, 
el encierro, 
la poca libertad..

Queman el cuerpo, 
lo calcinan internamente..
Como si se tratase de un leño seco, 
cortado a hachazos y echado al fuego.

Así de dañado queda mi cuerpo, 
así de seco queda mi corazón,cuando te vas, amor.











viernes, 5 de junio de 2015


Niña de miel,
la luna te observa,
la luna te esta mirando,
y no sabes qué es lo que te ve.

Recorres los cerros mirando hacia el suelo,
vas flotando como una pluma,
tocas las nubes y formas tu cielo,
con la contextura de la espuma.

Cerras los ojos,
y creas música indecente,
bailoteando mentalmente,
-como un tornado- 
en un big bang hiperbólico.

Si niña, si,
la luna aún te observa,
aún te esta mirando,
y no sabes qué es lo que te ve.

jueves, 4 de junio de 2015

Verte me desarma el alma,
-me corrompe-
me convierte en una nota grave,
en acordes bajos.

(Y cuando estás,)
cuando estas soy la nada,
- al igual que cuando no estas -
verte      me     desarma     el     alma.

Verte es sangrar,
es ser un viento pasajero,
verte es ver,
 como mi bien,
se evapora en el tiempo,
verte      es     sangrar.

Verte es -la antesala de- la muerte,
como el otoño lo es,
para las hojas que mueren, 
en el invierno más crudo,
tu    piel    es    muerte.

Moriría millones de veces,
si la vida lo permitiera,
moriría por vos,
por amor,
por vivir,
moriría   -por vos-  millones    de    veces.

viernes, 29 de mayo de 2015

Por donde quiera que mire, siempre estoy encontrándote...

Las copas manchadas con pintalabios bordeaux, que tus labios desteñían,
los maquillajes desordenados en el lavabo, 
los dibujos en la mesa de luz, 
las frutas acomodadas por color, 
la caja de té fuera de lugar, 
las migajas de cereales en la mesada, 
tus bombachas en la canilla del baño, 
la pasta dental destapada,
la cortina del baño corrida hacia el lado derecho mirándola de frente,
la ropa arriba de la silla sin doblar,
las medias de lycra dentro de los zapatos,
los lápices de colores desparramados en un tarrito, 
las monedas arriba del tele..

Mi yo desalineado.

¿Qué tan mal tengo que estar para pedirte que te quedes -una vez más-?

jueves, 19 de marzo de 2015

"- ¿Te duele querer?

+ Si, me duele.
Me duele cuando se que solo tengo que limitarme a eso, a querer.
No podes amar a una persona que solo te quiere, porque te duele, así que solo "la queres", porque sabes que si le decís que la amas, todo cambia.
Duele eso, que alguien no te ame, cuando vos si lo haces.
Entonces, solo te limitas a decirle a esa persona, cuanto la queres...
Aunque por dentro sabes que la amas con locura..."





miércoles, 11 de marzo de 2015

Hace rato que espero a que oscurezca,
para hablar con vos,

con la luna de por medio.

Confieso que te extraño un poco (más cada día), y que la necesidad de estar en tus brazos, se hace más insoportable con el paso de los días.

Elijo la noche para buscarte, porque cada vez que la luz se va, siento que no hay obstáculos que me impidan imaginarte acá.
Los edificios y las calles se esfuman como si la magia caminara sigilosa por alguna parte.


[Te busco.  Cierro los ojos para  verte cerca.]


Y  ahí estas,  (sonriendo sin decir una palabra). 

Y yo acá, sin poder parar de mirarte, no me pidas que deje de hacerlo, cada segundo es importante. 

Los movimientos de tu boca me atrapan como a una mosca, cortándome la respiración y mis manos, lentamente se dirigen a tu rostro, como si la fuerza de un imán las atrajera, y mi nariz se acerca tanto que casi puede rozarse con la tuya.


Estamos tan cerca y yo con tanto miedo.


No caigo que estoy a nada de lograr todo, me encuentro a centímetros de tus labios, y no puedo creerlo. Hace horas estabas en otro lugar, caminando en otras calles, pensando en otras cosas, y ahora te tengo, y no te quiero soltar.


Mis manos no logran calmarse,
se afirman cada vez más,
 (inquietas)
 te aprietan contra mí,
y entonces,
 sucede.


Y al suceder, la luz no pudo esperar, y corrompió,
sin pedir permiso apareció,
y corrompió.


Apenas toqué tus labios el sol se asomó,
(pero yo esta vez logré besarte),
 y con él trajo todos sus obstáculos,
volvió todo y se quedó, pero vos no te quedaste
 (aunque haya podido besarte).


Te fuiste,
de nuevo desapareciste,

de nuevo te tengo lejos,
(aunque no tanto.)