viernes, 29 de mayo de 2015

Por donde quiera que mire, siempre estoy encontrándote...

Las copas manchadas con pintalabios bordeaux, que tus labios desteñían,
los maquillajes desordenados en el lavabo, 
los dibujos en la mesa de luz, 
las frutas acomodadas por color, 
la caja de té fuera de lugar, 
las migajas de cereales en la mesada, 
tus bombachas en la canilla del baño, 
la pasta dental destapada,
la cortina del baño corrida hacia el lado derecho mirándola de frente,
la ropa arriba de la silla sin doblar,
las medias de lycra dentro de los zapatos,
los lápices de colores desparramados en un tarrito, 
las monedas arriba del tele..

Mi yo desalineado.

¿Qué tan mal tengo que estar para pedirte que te quedes -una vez más-?